Soportar sin dejar de avanzar

¿Sabéis? El otro día me ocurrió una cosa, algo que  no sabría muy bien cómo describir. Quizás fue bastante inesperado para mí, quizás mi falta de experiencia  me haya pasada factura, sí, ¿porqué no? Eso que me ocurrió no fue algo anecdótico, de hecho, estoy segura que será algo que recordaré toda mi vida, algo único.

Sabes que algo es único cuando te das cuenta de que ni te ha pasado, ni te volverá a pasar en toda tu vida o tal vez te pase pero no sea lo mismo.

Vosotros a estas alturas os estaréis preguntando qué es eso que me pasó, eso que ha hecho que esté escribiendo esta entrada. Pues me pasó que pensando, después de todo lo que había pasado, después de estas semanas tan difíciles, me dí cuenta de las personas que verdaderamente estaban ahí cuando se las ha necesitado, y, si os digo la verdad, me sorprendió mucho y no por las personas que no estaban, sino por todas aquellas personas que demostraron tener un ápice de compasión. Me dí cuenta de quién es capaz de perder su tiempo manchando se las manos de mierda para que tú no te hundas en ella. Me dí cuenta de quién es capaz de darte un abrazo o simplemente de pararse a escucharte aunque solo sean algunos minutos de su tiempo. Esas cosas, esas, son las que te hace ver quien está ahí cuando lo necesitas. Esas cosas son las que te dicen a quién le importas verdaderamente y a quién no. Esas cosas son, sin lugar a dudas, las que te hacen levantar la cabeza y decir ''¡Aquí estoy yo!''.  Gracias a todas esas personas que me han ayudado me he dado cuenta de que, por mucho queramos, la mayoría de las veces no podemos solucionar nuestros problemas solos, que siempre necesitamos un abrazo, aunque queramos ir de ''duros'' por dentro seguiremos   necesitando a cada una de las personas que nos prestan ayuda.

Después de todo esto he aprendido que hay que seguir fuerte, pase lo que pase, si no lo haces por una misma, tienes que hacerlo por esas personas que están a tu alrededor, y que nunca es tarde para volver y seguir peleando en esto que algunos llaman vida, porque ''El mejor guerrero no es el que triunfa siempre, sino el que vuelve sin miedo a la batalla''.